Cartaya se echa a la calle para acompañar a la Virgen de Consolación en su Día Grande

11/09/2017
Numerosos/as cartayeros/as participan en los actos que se desarrollan durante todo el fin de semana. La multitudinaria procesión de ‘Subida’ culmina un fin de semana que deja para la memoria el emotivo pregón extraordinario de José Román, que hizo un espectacular recorrido histórico por la vinculación de Cartaya con la Virgen.

La tradicional Puja de Maniguetas y una gran salve de cohetes, cerraron, a las puertas de la ermita de Consolación, y bien pasada la medianoche, la intensa jornada con la que Cartaya celebró este domingo el Día Grande de la Virgen de Consolación. Fue el broche de oro a una Procesión de Subida muy emotiva y marcada por los actos con los que la Hermandad y la localidad entera han celebrado el 350 aniversario de los cultos y celebraciones entorno a la Virgen, efemérides con motivo de la cual las calles de la localidad se vistieron de gala.

Así, recibieron a la Virgen las tradicionales fachadas engalanadas con las banderolas y otras insignias de la advocación consolacionista, a las que este año se unieron las ramas de palmeras tan características de la ermita, que dieron aún más solemnidad y colorido a la salida procesional, que siguió su recorrido tradicional por las calles De la Plaza y Santa María de Consolación. Estuvo acompañada en todo momento por numerosos/as vecinos/as de la localidad, además de por la Banda de Música Santa María de las Nieves, de Olivares, las hermandades de Cartaya, hermandades vinculadas de otros municipios y las autoridades locales, con el alcalde, Juan M. Polo, y su Equipo de Gobierno a la cabeza. También formaron parte del cortejo numerosas hermanas de mantilla y los niños vestidos de monaguillos y el paso, como manda la tradición, fue exornado con los habituales nardos.

Además, se vivieron momentos muy emotivos, con petaladas y la interpretación de sevillanas dedicadas a la Virgen precisamente en la calle que lleva su nombre, a cargo del grupo ‘Paso a Paso’, que arrancaron el aplauso unánime del público. Especialmente emotivo fue también el momento en el que la familia Ramírez-Vázquez descubrió un azulejo con la imagen de la Virgen en la placita situada en la confluencia de la Calle Santa María de Consolación con Corral Concejo, un azulejo que ha donado dicha familia, y un gesto que agradecieron en nombre del pueblo de Cartaya, tanto el alcalde, Juan Miguel Polo, como el cura párroco, D. Manuel Domínguez Lepe, y como la hermana mayor de la Hermandad, Carmen Romero, que destacó que “a partir de ahora pueden disfrutarlo todos/as los/as cartayeros/as que durante todo el año pasan por aquí a ver a la Virgen a su ermita”.

Con la colorista procesión, que culminó con la tradicional Puja de Maniguetas, se ponía punto y final a una jornada que comenzó a las once de la mañana, con el Pasacalles de la Banda del Ateneo Musical de Cartaya, y prosiguió con la Solemne Función Principal que la hermandad y el pueblo de Cartaya dedican a la Virgen. La Función estuvo presidida por el cura párroco de la localidad, Manuel Domínguez Lepe, e intervino el Grupo de Cámara Santa Cecilia.

         Pregón Extraordinario de José Román

Con la jornada del domingo se cerraron los actos que se han venido desarrollando en las últimas semanas entorno a la Virgen, y que este año contemplaban, con motivo del 350 aniversario, el pregón extraordinario del catedrático de Historia Natural, José Román Delgado, que abrió el viernes por la noche el fin de semana Grande de Consolación. Y lo hizo arrancando el aplauso unánime de los/as numerosos/as cartayeros/as que asistieron en el teatro del Centro Cultural al completo y emotivo recorrido que Román realizó por cada uno de los hitos y momentos que han marcado y puesto de manifiesto la vinculación histórica de Cartaya con la Virgen de Consolación, que hunde sus raíces, como el propio pregonero señaló, “en la propia historia del municipio y en la devoción, la veneración y el inmenso amor que las distintas generaciones de cartayeros/as han profesado y siguen profesando a su Virgen”.

Acompañado por un grupo de músicos de la Academia Municipal de Música, y por la voz excepcional de la cartayera Soraya Méndez, José Román mezcló en su pregón datos históricos, fruto de su exhaustivo y minucioso trabajo investigador entorno a la figura de la Virgen y su relación con el pueblo de Cartaya, con numerosas vivencias y advocaciones a la Virgen, salpicando su brillante recorrido a través de la historia, con las vivencias personales y de todo un pueblo entorno a una Virgen que “siempre ha sido refugio y consuelo para los/as cartayeros/as”.

No faltaron en el excepcional trazo que Román dibujó de la vinculación de Cartaya con la Virgen, un emotivo recuerdo a cartayeros/as muy vinculados a la misma que ya no están entre nosotros, ni el repaso de las leyendas entorno a sus apariciones e intervenciones milagrosas; ni tampoco el recorrido por las celebraciones y romerías con las que todo un pueblo acudía a su ermita y alrededores para celebrar, con celebraciones más o menos austeras en función del contexto histórico, la devoción por su Virgen.

Fue un intenso y emotivo pregón, de una hora y media de duración, que como destacaron la hermana mayor de la Hermandad, y el alcalde, Juan Miguel Polo, “quedarán para siempre en la memoria de los/as cartayeros/as por su valor histórico y emotivo, porque ha sabido reflejar a la perfección esa unión entre Cartaya y su Virgen de Consolación”. Ambos le hicieron entrega al pregonero de un recuerdo en nombre de la Hermandad y del Consistorio, acto con el que se cerró esta cita extraordinaria con la historia, en el 350 aniversario de la celebración de los cultos en honor a la Virgen de Consolación en Cartaya.