El municipio de Cartaya conserva las características de un típico pueblo andaluz y las conjuga a la perfección con un cuidado desarrollo turístico, basado en el respeto al medio ambiente, y una amplia oferta pensada para ofrecer el mejor marco y las mejores condiciones para que el visitante experimente emociones nuevas que le hagan repetir. El término municipal de Cartaya está compuesto por tres núcleos urbanos: Cartaya, El Rompido y Nuevo Portil.
El Rompido es una de sus joyas turísticas. Es un asentamiento pesquero tradicional, que mantuvo durante muchos siglos la pesca artesanal como su principal sustento y que sigue conservando el tipismo de sus primeros pobladores, con casas bajas de un blanco inmaculado y un faro que se convierte en referencia de esta localidad. Es el enclave marinero de este municipio. En la actualidad el núcleo se ha modernizado y transformado en un enclave turístico de primer nivel que aún conserva importantes signos de su pasado pesquero.
Nuevo Portil se asoma al mar desde uno de los miradores más hermosos de la ‘Costa de la luz’ onubense. Con una extensión de 7 km. de litoral, se encuentra rodeada de pinos y enebros, siendo el ocio activo y la naturaleza sus mayores valores. Además, Nuevo Portil cuenta con instalaciones deportivas, educativas y náuticas de primer nivel, desde las que pueden llevarse a cabo excursiones en barco a lugares tan especiales como la playa virgen de la Flecha de El Rompido.
La playa de San Miguel es otro hermoso paraje. Se encuentra enmarcado entre los núcleos de El Rompido y Nuevo Portil, en la desembocadura del Río Piedras y frente a la flecha de El Rompido. Su principal atractivo es su pinar, que lleva directamente a una extensa playa de arenas blancas y finas. En ella encontrará un entorno natural, conjugado con todos los equipamientos necesarios para los bañistas. Es un lugar único donde el verde del pinar cartayero se funde con el azul del mar.
El municipio de Cartaya no es sólo un destino de 'sol y playa', sino que también ofrece un magnífico entorno natural, incluyendo un pinar con una superficie de 11.500 hectáreas y un paraje natural llamado 'Marismas del Río Piedras y Flecha del Rompido'. Junto con los complejos turísticos de cuatro y cinco estrellas de lujo, con cerca de 3.000 habitaciones, hay tres campos de golf de alto prestigio. Todo esto se complementa con una amplia selección de actividades recreativas y de ocio diseñadas para hacer que su estancia sea inolvidable. Cartaya, un enclave con un clima privilegiado hace que sea un destino turístico ideal durante todo el año.